Las reflexiones finales que generó la Conferencia de la ONU sobre Cambio Climático COP27, tomadas en Sharm el Sheij, exigen a todos los países un esfuerzo adicional para hacer frente a la crisis climática, empezando desde ahora.
El Secretario General de la ONU, António Guterres expresó lo mismo de esta forma: «La COP27 concluye con muchos deberes y poco tiempo».
¿Qué se ha conseguido en la COP27 y qué hay que hacer ahora para que el mundo pueda mantener a raya las peores consecuencias del cambio climático?
He aquí cinco conclusiones clave de la conferencia, que también determinarán las prioridades de la acción climática en 2023 y más allá:
1. Establecer un fondo específico para pérdidas y daños
La COP27 se cerró con un acuerdo innovador para proporcionar financiación por pérdidas y daños a los países vulnerables afectados por inundaciones, sequías y otras catástrofes climáticas.
2. Seguir con la intención clara de mantener 1,5 °C al alcance de la mano
El mundo se encuentra en una década crítica para la acción climática. No es una hipérbole: según el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático de la ONU, para limitar el calentamiento a 1,5 °C es necesario que las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero alcancen su punto máximo antes de 2025 y se reduzcan un 43 % antes de 2030. Es decir, dentro de siete años.
3. Exigir responsabilidades a empresas e instituciones
Esta nueva fase implica una nueva atención a la rendición de cuentas en lo que respecta a los compromisos adquiridos por sectores, empresas e instituciones.
4.Movilizar más ayuda financiera para los países en desarrollo
La financiación es el centro de todo lo que el mundo está haciendo para combatir el cambio climático. En este tema crucial, la COP27 creó una vía para alinear los flujos financieros más amplios hacia un desarrollo bajo en emisiones y resiliente al clima.
5. Pasar a la acción
Las promesas climáticas no valen ni el papel en el que están escritas si no se sacan de la página y se convierten en acciones concretas.
Por eso se esperaba que la COP27 fuera la de la «implementación».
El paquete de decisiones adoptadas en la COP27 se centra especialmente en la aplicación: su objetivo es reforzar la acción de los países para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y adaptarse a los impactos inevitables del cambio climático, así como impulsar el apoyo financiero, tecnológico y de capacitación que necesitan los países en desarrollo.