Natura obtuvo nuevamente su certificación B Corp, otorgada por B Corporation en Estados Unidos y avalada por su representante en Latinoamérica (Sistema B).
A fines de 2014, la compañía pasó a formar parte de una red global de empresas que asocian el crecimiento económico a la promoción del bienestar social y ambiental. Con esta re-certificación, Natura reafirma su protagonismo en la agenda de desarrollo sostenible global, siendo la mayor B Corp industrial y la primera de capital abierto en el mundo. En esta oportunidad, la evaluación englobó todas las operaciones del grupo, incluso la marca australiana Aesop,cuya adquisición se concluyó a finales del año pasado.
Para recibir el sello y formar parte del movimiento de empresas B, es necesario pasar por un riguroso proceso de certificación y alcanzar una puntuación mínima de 80 puntos sobre un total de 200. Natura 120 puntos, un alza del 11% en relación a su puntaje de 2014.
Actualmente, hay más de 50 empresas B en Argentina y 250 en América Latina. En todo el mundo, el movimiento B Corp reúne a casi 2.500 compañías de 130 sectores diferentes.
Las Empresas B agregan a su negocio desafíos sociales y ambientales logrando así que generar positivo sobre el planeta y las personas que lo habitan.
Para conmemorar este nuevo hito, Natura realizó un evento especial en San Pablo (Brasil) en el que invitó a dialogar sobre las nuevas economías, en las que los negocios pueden y deben brindar soluciones para el desarrollo sostenible, con el desafío de generar impacto positivo para la sociedad y el medio ambiente.
El encuentro contó con la participación de Guilherme Leal, uno de los socios-fundadores de Natura y Richard Branson, Fundador del Grupo Virgin y Cofundador del B Team.
¿Por qué Natura es una B Corp? La gestión sustentable de la empresa hace foco en seis ejes centrales:
Amazonía, Biodiversidad y Comercio Justo: Natura actúa en Brasil en alianza con treinta y tres cooperativas, siendo que veinticuatro están en la Amazonía, generando desarrollo social e ingresos para 2.119 familias a partir de cadenas productivas sostenibles.
El trabajo con la biodiversidad ayuda a conservar 257 mil hectáreas de selva en pie, un área superior a la del Reino Unido, al mostrar que la selva vale más en pie que talada.
Innovación y tecnología sostenible: Las inversiones en esas áreas son fundamentales para la generación de impacto positivo en el planeta. En sus productos se utilizan casi 20 activos de la biodiversidad brasileña, uniendo el conocimiento tradicional y la producción artesanal a la tecnología de vanguardia y a la eficacia comprobada. Sus fórmulas priorizan la utilización de materias primas de origen vegetal y, por lo tanto, renovable.
En los perfumes se utiliza el 100% de alcohol orgánico obtenido a partir de la caña verde, sin uso de defensivos agrícolas o de áreas quemadas, el cultivo del alcohol sostenible contribuye para la regeneración de la vida de 20 mil hectáreas, con el retorno de más de 340 especies de animales a su hábitat natural y el aumento del 30% del volumen de agua de arroyos y ríos de la región.
Innovación de bajo carbono: Con el uso del plástico verde realizado a partir de la caña de azúcar, se evita la emisión de 4,9 mil toneladas de carbono al año, una reducción de gases del efecto invernadero equivalente a 858 vueltas de automóvil alrededor de la Tierra. También se evita el descarte equivalente a 5 millones de toneladas de botellas PET y de 530 toneladas de vidrio al año con el uso de plástico y vidrio reciclados en los embalajes. Las fábricas de Natura utilizan el 100% de la energía renovable y desde 2007 es una empresa 100% de carbono neutro.
Natura fue la primera empresa de América Latina que contabilizó el impacto de sus negocios en el medio ambiente, por medio de la metodología internacional (conocida en inglés como “EP&L”, Ganancias y Pérdidas Ambientales). Con base en ese análisis que se profundiza en todas las etapas de vida de los productos, la empresa es capaz de contabilizar el uso y la contaminación del agua, la emisión de gases del efecto invernadero y de contaminantes del aire.
Diversidad e inclusión: En Natura, el 63% de los colaboradores son mujeres y el 47% de ellas están en cargos de alta gestión o superiores. También la compañía prioriza la inclusión de personas discapacitadas. Actualmente en Natura, un porcentaje del 5,8 son personas discapacitadas, una cifra superior a la exigencia de la ley, del 5%.
Desarrollo humano y social de la Red: Por medio de la actividad de consultoría, se genera empleo y renta para 1,8 millón de mujeres.
El Índice de Desarrollo Humano aplicado a las consultoras, que mide la calidad de vida en aspectos tales como trabajo, educación y salud, registró una mejora del 7,7% entre 2014 y 2016.
Educación: Los recursos producidos por la línea Creer para Ver son destinados en el 100% a proyectos del Instituto Natura. Allí se desarrollan programas para ofrecer mejora de educación a las consultoras Natura. En alianza con universidades, centros de profesionalización, objetos digitales de aprendizaje y escuelas de idiomas, más de dieciséis mil consultoras y sus familiares volvieron a estudiar en menos de un año. Desde 1995, cuando se lanzó la línea Creer para Ver, se recaudaron más de R$ 188 millones, beneficiando a más de 3 millones de niños en 3.300 municipios.