Como parte de su estrategia de Inversión Social con foco en la Inclusión Laboral y la accesibilidad de personas con movilidad reducida, la entidad financiera logró obtener la certificación en 9 de sus sucursales.
Esta certificación, que es solicitada en forma voluntaria por las empresas, consiste en evaluar distintos aspectos de la accesibilidad al edificio. La revisión está a cargo de un equipo de evaluadores pertenecientes a ALPI – Asociación Civil es una organización sin fines de lucro que, desde hace más de 70 años, se dedica a la rehabilitación neuromotriz de pacientes pediátricos y adultos –entre ellos un usuario de silla de ruedas, acompañados por un responsable del establecimiento a certificar.
Las sucursales certificadas se encuentran ubicadas en Salta, Tucumán, El Talar, San Miguel, Moreno, Rosario, Córdoba, Ciudad de Buenos Aires y marcan el inicio de un proceso que Banco Galicia llevará a todos sus establecimientos.
Esta iniciativa tiene por objetivo garantizar la accesibilidad y trabajar en la integración de clientes y colaboradores con discapacidad, se complementa con las acciones ya desarrolladas desde 2007 por el banco en materia de inclusión laboral de personas con discapacidad.